Aumento de Glúteos
Los glúteos representan una de las áreas de mayor belleza y sensualidad de una mujer. La genética juega un papel importante en la determinación de la forma de nuestro cuerpo, y mientras algunas mujeres sienten que tienen mucho en ciertas áreas, otras sienten como si hubieran sido estafadas en la repartición genética. Esto es muy cierto en el caso de los glúteos. Los glúteos son una de las partes del cuerpo que las mujeres también desean cambiar o mejorar, pero muchas veces por falta de conocimiento o mala información no se animan a realizar el cambio. Si se decide por la operación, lo que obtendrá serán unos glúteos mejores en forma y tamaño, lo que beneficia a la figura en general y por lo tanto a la autoestima de la persona y su sensación de bienestar.
El aumento de glúteos es un procedimiento quirúrgico dirigido a mejorar el tamaño y la forma de los glúteos insertando un implante en cada uno de ellos.
¿Quién puede someterse a un aumento glúteo?
Los candidatos ideales para someterse a un aumento de glúteo son aquellas personas sanas, emocionalmente estables que comprenden los resultados que se pueden obtener tras la cirugía. El aumento glúteo puede mejorar su apariencia y su autoestima. Sin embargo antes de decidirse debe revisar cuidadosamente cuáles son sus expectativas y discutirlas con el cirujano plástico. El aumento glúteo se realiza generalmente para mejorar el contorno corporal.
Planificando la cirugía
Durante su primera consulta, el cirujano plástico evaluará el tamaño y la forma de las mamas, la firmeza de la piel y su estado general de salud. Debe exponer sus expectativas y dudas de manera sincera y franca, con esto, el cirujano plástico le mostrara las alternativas disponibles para su problema, con los riesgos y limitaciones de cada una de ellas. También se le explicara cual es el tipo de anestesia que se empleara y los costos de la intervención.
La cirugía y la anestesia
El método de insertar y posicionar el implante depende de su anatomía. La incisión será hecha en el pliegue interglùteo. A través de incisión se crea un bolsillo, bien directamente detrás de la fascia del glúteo mayor o bien intramuscular. El implante se centra sobre la nalga. Se realiza bajo anestesia general, permaneciendo el paciente dormido durante la operación.
La cirugía generalmente lleva de una a dos horas. Se cierra la herida con una sutura enterrada y posteriormente se cubre la zona con apósitos durante dos o tres días para permitir que su cicatrización sea correcta.
Después de la cirugía
Se sentirá cansado algunos días tras la intervención, pero será capaz de realizar una actividad relativamente normal en uno o dos días. La mayor parte de sus molestias serán tratadas con medicación. En dos o tres días se retiraran vendajes y le indicaran el tipo de faja que debe emplear. Los glúteos tardaran algunas semanas más en recuperar su aspecto completamente normal.
Riesgos
Como en cualquier operación, hay riesgos asociados con la cirugía o complicaciones especificas asociadas con el procedimiento. Como con cualquier procedimiento quirúrgico, el sangrado tras la operación puede causar acumulación de líquidos. Hay un pequeño riesgo de hematoma que si se presenta puede requerir la evacuación de la sangre acumulada.
La nueva imagen
Los pacientes sometidos a este tratamiento mejoran es aspecto y autoestima al encontrarse más seguros con su nuevo aspecto. La decisión de realizar un aumento de glúteo es altamente personal y si consigue sus objetivos y expectativas, la cirugía es un éxito.
Si usted está pensando en someterse a una intervención de Cirugía Plástica, acuda a con un Cirujano Plástico Certificado por la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica y Reconstructiva.
La mayor parte de la hinchazón y de las alteraciones de la coloración de la piel, desaparecen dentro de las dos primeras semanas después de la cirugía, la mayoría de los pacientes se levantan al día siguiente de la cirugía. Están aptos para volver a realizar actividades que no requieran esfuerzo físico, a la semana después de la operación (asistir a clases o trabajo).
Un mes después de la intervención la persona operada está en condiciones de reanudar las tareas físicas o deportivas. Se recomienda retomar estas actividades, en forma paulatina. En relación a la exposición solar, se sugiere evitarla por lo menos los dos primeros meses y supeditado a la región geográfica en que resida el paciente. Es conveniente los primeros meses usar también un filtro solar sobre el área operada y regiones vecinas.